EL ESTILISTA CARLOS CACHO

¿UN CASO DE BURLA A LA JUSTICIA?

La presente no es una nota homofóbica, ni mucho menos. Simplemente es la preocupación de un cronista acerca de los hechos que se han venido sucediendo a partir del atropello que sufrió un ciudadano, y el desdén con que trata el caso el promotor de lo acaecido.

CARLOS CACHO Y SU SATÍRICA RESPUESTA

Sucede que el estilista Carlos Cacho, hasta la fecha al parecer no ha abonado la suma de dinero que el Poder Judicial ha decretado por haber atropellado al ciudadano Humberto Izarra a quien le habría causado múltiples traumatismos comprobado por el médico legista del estado.

El abogado del agraviado declaró “Desde que mi patrocinado salió de alta el señor Carlos Cacho hace caso omiso y está evadiendo su responsabilidad. Aunque él siempre dijo que se haría cargo de todo la realidad es otra, no lo ayuda ni mantiene ninguna comunicación”.

Al no contar con los recursos económicos suficientes para ir a una clínica, Humberto Izarra, tuvo que acudir al Hospital de la Solidaridad para poder realizarse los exámenes de rigor y recibir apoyo con el proceso de rehabilitación, pues hasta el momento se encuentra postrado en una cama con peligro de contraer una artrosis, como resultado de quedar herido con una clavícula rota, un tobillo destrozado y al menos tres costillas rotas; todo gracias a que el polémico conductor del programa de TV “Mil Disculpas” se niega a hacerse cargo de su rehabilitación.

En caso de seguir obstinadamente en incumplir con sus deberes la orden de comparecencia que goza Carlos Cacho actualmente, podría volver a cambiarse el mandato a detención, es decir, podría ir a la cárcel

Concluye el letrado “Nosotros pediremos una conciliación con el señor Cacho, pero si no accede lamentablemente tendremos que ir a un juicio civil”.       

Como se recuerda, la fiscal Nelly Millones Palmadera  pidió 7 años de prisión por el presunto delito de resistencia a la autoridad y lesiones culposas graves, además del pago de S/.40 mil de reparación civil para Izarra y S/.30 mil para el Estado.

Pero la jueza Nancy Carmen Choquehuanca rebajó la pena a cuatro años de prisión suspendida y un pago de 70 mil soles de reparación civil por atropellar a Humberto Yzarra Álvarez en el 2010.

Por esa misma razón Carlos Cacho fue denunciado por tres delitos: resistencia a la autoridad (se confirmó que el maquillador se resistió a la prueba del dosaje etílico), lesiones graves (cometidas en agravio de Humberto Izarra) y falta grave (por conducir sin portar licencia de conducir y sin SOAT vigente)

Sin embargo lo que más preocupa es que haciendo gala de un extraño tipo de poder se burla de la justicia peruana y de Humberto Izarra. Luego de haber atropellado a este último, se dio el lujo de no someterse a la prueba de alcoholemia. Y ante la pregunta de un periodista del por qué no se sometió al examen que es requisito respondió irónicamente “es que un pajarito me aconsejó que no me lo haga”. Para algunos de sus fanáticos puede significar una broma; pero imaginemos que hubiera sido lo contrario y Carlos Cacho hubiera sido la víctima. ¿Él habría aceptado esa respuesta?

Y por último Carlos Cacho tiene el “agravante” de ser reincidente pues también estuvo involucrado años atrás en un hecho similar en Cuba, a bordo de un vehículo en el que también viajaba el ex alcalde de San Juan de Lurigancho, Ricardo Chiroque, y en el que perdió la vida un regidor.

Se dice que la justicia tarda pero llega; pero la justicia tarde no es justicia.