Donald Trump, presidente de Estados Unidos de Norteamérica, tiene una forma muy peculiar de ser. Sus anuncios parece que fueran irreflexivos, impulsivos, sin pensar. Pero hay que tener en cuenta que él responde al sistema de su gobierno, de su país. La Globalización ha hecho maravillas económicamente hablando, en el mundo; pero muy poca gente quiere reconocer que una guerra, una conflagración se esta desarrollando, donde se ve que priman los intereses económicos, como siempre los han sido. Esta vez la guerra no es solo convencional. Otros campos intervienen, como la tecnología, etc. Ya veremos los resultados más adelante
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