SUBMARINO RUSO NO TRIPULADO 

David Alberto Cornejo Moya-Mendez. 

Los rumores sobre un dron nuclear ruso super potente llegan a EEUU
En EEUU se produjo un debate sobre cuán peligroso podría ser el submarino nuclear ruso no tripulado Status-6, con una supuesta carga de 100 megatones.
El proyecto del submarino nuclear no tripulado Status-6 apareció en los medios de comunicación rusos por accidente hace más de dos años. El 10 de noviembre de 2015, durante una reunión del presidente ruso, Vladímir Putin, con representantes del Ministerio de Defensa de Rusia, el camarógrafo de uno de los canales de televisión rusos hizo una toma en primer plano de la página de presentación del proyecto.
En la diapositiva salía un torpedo con 10.000 kilómetros de alcance y velocidad máxima de 185 km/h, dotado de ojiva nuclear y capaz de provocar "daños garantizados" por medio de amplia y duradera contaminación radiactiva de las zonas costeras del enemigo.
Sobre la base de los pocos datos disponibles, los expertos concluyeron que el dron submarino sería discreto, rápido y automatizado. Su tarea principal sería llevar a las costas de un posible enemigo cargas nucleares que podrían alcanzar hasta 100 megatones.
Sin embargo, hoy en día, los rumores sobre el potente dron submarino han vuelto a provocar discusiones entre los expertos, esta vez, estadounidenses, tras la reconsideración de la política nuclear de EEUU que ahora califica el Status-6 ruso como "un arma real que podría representar amenaza a EEUU".
En este contexto, el columnista del diario The National Interest, Dave Majumdar, reunió las opiniones de varios analistas respecto al submarino ruso.
Algunos expertos militares están tratando de tranquilizar a los lectores, asegurando que el submarino torpedo no tripulado no será un arma eficiente. Mientras tanto, otros especialistas admiten que el submarino, de hecho, es lo suficientemente grande como para transportar cargas de megatones, y es muy peligroso.
Al mismo tiempo, el principal problema para Washington radica en el hecho de que el Status-6 sea capaz de ignorar los sistemas de defensa de misiles estadounidenses.











RUSSIAN NON-CREW SUBMARINE

David Alberto Cornejo Moya-Mendez

Rumors about a superpower Russian nuclear drone arrive in the US
In the US there was a debate about how dangerous the unmanned Russian nuclear submarine Status-6 could be, with a supposed load of 100 megatons.
The unmanned nuclear submarine project Status-6 appeared in the Russian media by accident more than two years ago. On November 10, 2015, during a meeting of Russian President Vladimir Putin with representatives of the Russian Ministry of Defense, the cameraman of one of the Russian television channels made a close-up of the project's presentation page.
On the slide came a torpedo with 10,000 kilometers of range and maximum speed of 185 km / h, equipped with a nuclear warhead and capable of causing "guaranteed damage" through extensive and lasting radioactive contamination of the enemy's coastal areas.
Based on the limited data available, the experts concluded that the submarine drone would be discrete, fast and automated. Its main task would be to carry to the costs of a possible enemy nuclear charges that could reach up to 100 megatons.
However, today, rumors about the powerful submarine drone have once again provoked arguments among the experts, this time, Americans, after the reconsideration of the US nuclear policy that now qualifies the Russian Status-6 as "a real weapon that it could represent a threat to the USA. "
In this context, the columnist for The National Interest newspaper, Dave Majumdar, gathered the opinions of several analysts regarding the Russian submarine.
Some military experts are trying to reassure readers, assuring that the unmanned torpedo submarine will not be an efficient weapon. Meanwhile, other specialists admit that the submarine, in fact, is large enough to carry loads of megatons, and is very dangerous.
At the same time, the main problem for Washington lies in the fact that Status-6 is capable of ignoring US missile defense systems.

Comentarios