VIGILIA, MAÑANA, POR LA JUSTICIA
PERCY ANTONIO COLLAO ALVA.

Lo que si es cierto es que todo se aprende de niño. Toda enseñanza teórica queda de lado cuando se practica lo aprendido. Pondré un ejemplo no quiero mencionar nombre pero todo lo que diré será evidente. Es un peruano humilde de Ica que llegó a la selección de mayores jugando en la segunda profesional. Fue un astro en el Club español «Barcelona». Si bien es cierto la presencia del padre es determinante en algunos casos. A veces es preferible que el padre no llegue a la casa si los padres de los niños van a ser testigos de puras riñas.
Porque he indicado el caso, el hijo estaba llamado a ser mejor jugador que el padre, pero heredó, lamentablemente la afición a la bebida alcohólica. Cervecero cien por ciento. El hijo comenzó bien, su padre lo apoyaba, pero traía lecciones aprendidas desde muy niño. Y nunca las pudo superar. Comenzó a jugar en la U y todo quedó ahí, fue convocado por un equipo del interior. Pero la inclinación hacia el licor lo venció.
Algo parecido sucedió con Reimond, excelente jugador ha desperdiciado todas las oportunidades que se le han presentado. Recuerdo la primera crónica que leí de él: «¿Quién es ese venezolano, que se pone la camiseta de la selección peruana y juega como brasileño? Venezuela es un país fácil de perderse, «excesivamente modernizado» Una mezcla de USA con Suecia. Fue considerado el mejor jugador de su categoría, superior a un colombiano que ahora brilla con estrella propia en Europa. El nuestro se perdió. El problema está en saber ¿cómo fue su infancia? Pregunté a un pelotero ¿qué sucedía con Rei? y me respondió muy enojado «ese tiene músculos de viejo». Es decir se desperdició un talento.
He tratado sólo el tema de dos deportistas. Pero hay una cosa bien cierta, nadie sabe lo de nadie. Los feminicidas qué infancia habrán tenido ¿Qué habrán visto? ¿Qué les habrá sucedido? Y así surgen tantas interrogantes. Pero todas las respuestas quedan en eso, son solo respuestas. Porque nada justifica el hecho de agredir a una mujer.
He tratado sólo el tema de dos deportistas. Pero hay una cosa bien cierta, nadie sabe lo de nadie. Los feminicidas qué infancia habrán tenido ¿Qué habrán visto? ¿Qué les habrá sucedido? Y así surgen tantas interrogantes. Pero todas las respuestas quedan en eso, son solo respuestas. Porque nada justifica el hecho de agredir a una mujer.
Voy a una comisaría porque mi hermana menor no me deja ver a mi mamá, no quiere que entre a la casa. Le pido al suboficial de guardia apoyo para que constaten que no me permiten ingresar a la casa. Y el muy imbécil del PNP, me dice «así es que a usted le gusta pegarle a su hermana» solo le respondí a boca de jarro «yo no soy ningún cobarde, que golpea a una mujer» El mequetrefe se quedó mudo.
Mañana se hace una vigilia, a las 6 pm., adjunto el aviso a la presente nota. Es obligación participar de este acto. Debe acabarse de una vez por todas con esos atropellos, agresiones y muertes de mujeres. Definitivamente debemos denunciar a la Convención de Costa Rica y tener acceso libre a eliminar a tanto indeseable que maltrata a una mujer. Hay que aplicar la castración quirúrgica. Yo no sé qué espera la Iglesia Católica de no ponerles una piedra de molino al cuello a tanto cura pedófilo y arrojarlos al mar. No se puede tener un mínimo de compasión con esas bestias. Hagamos sentir nuestra voz de protesta. Ahora o nunca.
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