LOS PENALES SON CENTROS DE REHABILITACIÓN

LOS PENALES SON CENTROS DE REHABILITACIÓN
Guillermo Bermejo Rojas
No amigo, los penales no son centros de tortura, exterminio o castigo. Deben ser un lugar de rehabilitación. La única pena es la privación de la libertad. Si el estado no cumple con su misión es porque además de ineficiente es corrupto. Roban con la comida y con los talleres. Trafican drogas, alcohol y celulares. Ponen precio para que tengas gollerias y zonas VIP. Demonizando a los presos ocultan esa cantera de futuros delincuentes que son la pobreza y la gigantesca desigualdad. Así que tus deseos de que se mueran todos lejos de ayudar a buscar una solución abona a más de lo mismo.
Odias al choro que te arrebato un celular, que mató a un familiar saliendo del banco o al volador de niñas? Yo también. Pero también debes recordar que la mitad de los presos no tienen sentencia y gran parte de ellos son inocentes. Y te lo digo yo que pase por eso. Y por eso te pido que entiendas que si los penales se vuelven focos infecciosos de coronavirus, no sólo morirán ellos sino que infectaran agentes del INPE, la policía y ellos a sus familias, colegas y un largo etcétera que puede llegar a ti o a los tuyos. Es de elemental inteligencia entender esto último.
Que les hagan pruebas a todos, que aislen a los positivos y hospitalicen a los graves. Y que manden a casa a los que sufren VIH, cáncer, tbc, trastornos mentales y las mujeres embarazadas o con hijos en los penales. Que esta pandemia saque lo mejor de nosotros. Y que las cárceles no se vuelvan cementerios ni depositos humanos.

Esto es un añadido que le hago yo, no fue escritor realizado por el autor de la crónica. Sólo entiende el valor de LA LIBERTAD, quien ha estado preso, más injustamente por luchar por sus ideales. En 1978-1979, el docente que no estuvo preso, o tuvo suerte que nunca lo cogieron la GC -de ese tiempo-, o en todo caso fue un triste y despreciable «amarillo». Y me van a contar ese cuento a mi.
HAY QUE HABER ESTADO PRESO, UN SOLO DIA, PARA SABER LO QUE VALE LA LIBERTAD... PENSAR QUE ESCUCHABA ESTA CANCIÓN DE NIÑO, EN LA VOZ DEL ÚNICO «EL INQUIETO ANACOBERO», DANIEL SANTOS, DE PUERTO RICO, ¿CÓMO NO NACIÓ EN EL CALLAO, POR DIOS...?

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