Además de haber endeudado a nuestra patria ante el BM y el FMI, por miles de millones de dólares. No ve ni oye lo nuevo que se produce en el país en bien de los más humildes. Por ejemplo: la UNI y la PUCP han lanzado nuevos proyectos para apoyar en la contra el COVID-19, a los cuales ha ignorado, prefiriendo la ayuda externa que significa dependencia.
Una vez más prefiere, por ejemplo la ayuda de EEUU que ha donado 250 ventiladores al Perú, para la lucha contra el COVID-19,
la ayuda fue a través de la Agencia para el Desarrollo Internacional (USAID), ventiladores
nuevos, son de última generación.
EEUU
apoya al Perú para la prevención, en casos de emergencias de salud y lo realiza
a través de diferentes frentes y sectores. Lo último fue una donación de US 2.5 millones de
dólares que será canalizada a través de la Agencia de los Estados Unidos para el
Desarrollo Internacional (USAID), aseguraron fuentes dignas de crédito.
Aquí la propuesta de los peruanos.
Un grupo de ingenieros peruanos, de la PUCP -PONTIFICIA UNIVERSIDAD CATÓLICA DEL PERÚ-, diseñan ventiladores pulmonares para atender emergencias por coronavirus. El Ingeniero Benjamín Castañeda, es uno de los integrantes del grupo promotor de este aporte científico para la salud.
El profesor e investigador de la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI), Manuel Luque, diseñó un prototipo de un ventilador mecánico a muy bajo costo y con un alto nivel de calidad. El docente asegura que se trata de piezas de dimensiones que pueden ser fabricadas en una impresora 3D que la puede tener cualquier persona, y tiene un costo aproximado de $500.
El prototipo del ventilador mecánico es fabricado con implementos que son fáciles de conseguir, debido a que no son elementos médicos que están agotados en el mercado. El ingeniero Manuel Luque, solicita apoyo, para empezar a fabricar hasta 40 ventiladores por día.
Por
ejemplo el ingeniero agroindustrial ayacuchano Julio Joel Garay Barrios, el
joven ayacuchano creador de las galletas contra la anemia Nutri Hierro —ahora:
Nutri H— es uno de nuestros tantos valores que espera, pacientemente, el apoyo
del gobierno central.
La
galleta cuenta con 13 ingredientes, entre ellos: harina de trigo fortificada,
lentejas, sangrecita, quiwicha, huevo, chía, entre otros. Todos altos en
contenido de proteínas, minerales y vitamina C para su mejor absorción.
Una
vez elaborada, la galleta, el Ingeniero Julio Garay venía lo más importante saber
si funcionaban. Por ello eligieron el AA HH de Mollepata y luego el centro
poblado de Allpachaca, donde la mayoría de los niños tenían anemia (10,8 de
hemoglobina promedio).
Este
dato lo otorgaba la OMS, que sostiene que el nivel mínimo de hemoglobina en un
niño es 11.
Con
el apoyo del centro de salud desparasitaron, a los niños, y les hicieron
consumir las galletas, durante 30 días. Los resultados superaron las
expectativas. Los niños subieron su hemoglobina hasta 15.
El
distrito de Ventanilla, fue uno de los primeros que incluyó Nutri H en sus
programas de salud para los escolares del distrito, el 78% de los niños
participantes en el plan piloto aumentó hasta en 10 puntos sus niveles de
hierro en la sangre.
Ahí,
fue que la demanda comenzó a incrementarse y Garay empezó a contratar a sus
compañeros de la universidad, con el apoyo de la empresa privada realizó un
nuevo diseño para sus galletas, nuevo empaque. Ahora cuenta con una planta
industrial que puede producir 10.000 bolsitas por hora.
Hay que tener en cuenta que
el ingeniero agro.industrial ayacuchano Julio Joel Garay Barrios se impuso a las
iniciativas de Chile -un guante para personas con discapacidad total o parcial-;
“BioGio”, de Colombia, un indicador LED controlado por los movimientos de la
cabeza para prevenir accidentes; “Thermy”, de México, un estudio complementario
para la detección temprana de cáncer de seno y “Speakliz Vision”, de Ecuador,
un proyecto de apoyo para las personas con discapacidad audiovisual.
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