Y NADA MÁS...
Te pegunté ¿por qué me besaste?,
altanera, respondiste:
te vi como un niño perdido
Fue un beso de compasión.
Tonto, creer que fue por amor.
Jugaste, conmigo
permitiste, sonriendo,
que llegara a tus lugares
Y te reías, engañándome que disfrutabas
¿Qué te hice yo?
¿Por qué jugaste conmigo?
Pagué tu tres purgatorios anteriores!
Me lo merezco, por haberte amado
como un inexperto adolescente
con mi ridícula edad
Ya sé que no estás, jamas, a mi lado,
nunca más, conmigo,
pero no te has ido.
tu todo, lo carga mi alma.
Haz tenido el valor de darme la espalda
tratarme como una piedra
que se patea despectivamente,
a un costado,
porque estorba
Y decirme: si tengo alguien
con quien, digamos, converso, nada más;
y te escondes para que no escuche
lo que hablas.
Sí, todo viene de mucho tiempo atrás
te enviaba corazones, saludos,
y tu correspondías
mientras a mis mensajes,
los ignorabas.
Me viste llorar,
me viste rogar,
me viste ausente de mi
me viste huérfano de ti;
pero eso ya nunca verás
porque con dolor
cerré mi puerta para ti
y no la abriré jamás
Tu ausencia me mata
tu sonrisa, se perdió
entre aquellas historias
que te rogaba, no me las cuentes por favor
y me decías, sonriendo
yo, quiero que sepas quien soy,
y yo, quiero saber tu pasado
Nuestra separación
es responsabilidad de ambos
Yo con mi ridícula audacia
de ofenderte borracho.
Tu perdonando, en silencio,
por lástima, mis míseros ruegos.
Ya sé que no volverás,
si me importa,
no lo puedo negar
no lo logro ocultar
.
Pero que importa
si soy una vida más que se pierde
una
y nada más...
Comentarios
Publicar un comentario