LOS VUELOS AEROSTÁTICOS SON DE ORIGEN CHINO

LOS GLOBOS AEROSTÁTICOS SON DE ORIGEN CHINO I

PERCY ANTONIO COLLAO ALVA.

Pues lo que comenzó como una estrategia de comunicación militar en China, durante el período de los Tres Reinos, hoy es un símbolo de celebración en el mundo entero. En ese tiempo se les llamó linterna voladora. Su invención se le atribuye al general Zhuge Liang, y fueron usadas para asustar a las tropas enemigas. Debido a la ignorancia de las tropas adversarias. Se sabe que Zhuge Lian, fue un escritor, general militar, ingeniero e inventor, muy reconocido por su labor durante su carrera como militar estratega chino. También llamado Zhu Ge Kong Ming o Kong Ming, fue el principal estratega y consejero del reino de Shu.

Para que vuele un globo se necesitan al menos 3 personas. Una sostiene el globo en posición, mientras otra enciende la mecha y entre tres sostienen el globo de cantoya hasta que se llene de aire caliente. Una vez esté listo para ser soltado, el mismo globo avisará ejerciendo presión hacia arriba.

En ese tiempo para que vuele un globo se necesitaban mínimo 3 personas. Dos sostienen el globo en posición, mientras la tercera enciende la mecha. Posteriormente los tres sostienen el globo de cantoya hasta que se llene de aire caliente. Una vez esté listo para ser soltado, el mismo globo avisará ejerciendo presión hacia arriba.

Cuando se encienden las mechas que los globos de cantoya traen incorporada, el aire dentro del globo se calentará, al hacerlo perderá densidad, lo que lo hará más liviano que el aire fuera de él, y es por este efecto que se elevarán mientras la mecha caliente el aire dentro del globo.

Una vez que el fuego se extingue, el aire comenzará a enfriarse, por ende, a ganar nuevamente peso, y esto lo hará bajar nuevamente. En su mágico vuelo el globo alcanzará unos 300 metros de altura en un viaje que durará entre 10 y 12 minutos, desplazándose en función de las corrientes de aire que hay a mayor altitud.

La linterna voladora o linterna volante, conocida también como linterna china, linterna del deseo, farolillo chino, globo de Cantolla o globo de papel seda, es una linterna de papel aérea originaria del lejano oriente, que ha adquirido popularidad en occidente. Está hecha con papel de arroz y con un armazón elaborado con bambú o con metal. En el interior de la linterna volante hay una base de parafina que es encendida para que la llama caliente el aire dentro de la linterna; haga disminuir la densidad y causando que la linterna se eleve al cielo. La linterna volante se mantendrá en el aire mientras siga viva la llama. Al apagarse la llama, la linterna cae al suelo.

El 8 de agosto de 1709, el sacerdote brasileño Bartolomeu de Gusmao hizo la primera demostración de ascensión aérea en globo de aire caliente no tripulado en la Casa de Indias de Lisboa, ante la corte del Rey Juan V de Portugal. Cómo eran tiempos del oscurantismo el religioso fue perseguido, por la Inquisición, por hechicería. Este invento fue denominado Passarola. Casi enseguida, el inventor, lejos de recibir el reconocimiento que se merecía, fue difamado por la Santa Inquisición, perseguido y obligado a huir. Se refugió en España y murió en Toledo, a causa de unas fiebres, a los 39 años de edad.

Posteriormente el 27 de agosto de 1783 en París, el “Globe” de Charles, construido con tela fina y recubierta de goma para impedir que escapase el gas, permaneció en el aire durante 45 minutos y aterrizando a una distancia de 25 kilómetros donde unos aldeanos que creyeron que se trataba de un ingenio del diablo lo destruyeron. En la barquilla van además las botellas de combustible —propano— y el quemador que sirve para calentar el aire. Con la finalidad de registrar cada vuelo existe un libro de la aeronave y en el del piloto, anota diversas ocurrencias y otras obligaciones documentales.

Mucho después y en forma errada se dice que fueron los hermanos Montgolfier, Joseph-Michel (1740-1810) y Jacques-Étienne (1745-1799), los inventores del globo aerostático. Comenzaron sus experimentos en Avignon en 1782, y en diciembre de ese año lograron construir el primer prototipo. La "nave" estaba tripulada por un cordero, un gallo y una oca. Nadie resultó herido porque el globo cayó cuando se le acabó el aire.

En España, la primera ascensión no tripulada la llevó a cabo Agustín de Betancourt y Molina, fundador de la Escuela de Caminos y Canales, ante la Corte Real el 28 de noviembre de 1783.

Algunas ideas fueron recogidas de diversas fuentes del internet, así como las imágenes.