EL QUE SE PICA PIERDE... Y POR GOLEADA...
Llegó Alejandro Toledo, el hombre que le ganó en la segunda vuelta en las elecciones, al soberbio, al hombre del ego inmenso. El período fue 2001 - 2006. En la memoria del elector quedó cuando se dieron la mano para despedirse. En ese instante el de 1,93 sacudió al delgaducho y frágil de 1,65. Y el grandazo perdió totamente las elecciones -que en la polémica, había ganado con amplitud-. Todo aquel que llega acusado de un delito mayor y cuenta con más de 70 años. Siempre adolece de muchos males que ponen en peligro su vida. El de Cabana, no podía ser la excepción. Hoy día lo vemos que realiza muy bien su papel, para no irala cárcel.
La pregunta del millón. El sano y sagrado, desperdició una gran oportunidad; pasar a la Historia como el primer hombre del pueblo, que realizó una excelente gestión. No quedó la menor duda. El poder lo desnudó y lo mostró tal como era en realidad. Uno más de aquellos que el poder los embriaga y pierde todo lo bueno de la imagen que tenía
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