REFLEXIONES DE MI VIDA.

REFLEXIONES DE MI VIDA.
PERCY ANTONIO COLLAO ALVA.
La que está sucediendo ahora, merece ser resaltado. Los abogados, siempre han cumplido un papel muy importante; desde que apareció el Derecho Romano. He conocido a tantos hombres de leyes, que sin exagerar, me pasaría todo el día hablando de ellos y el tiempo me quedaría corto. No quiero resaltar a algunos. Podría despertar el celo entre los abogados que conozco y que actualmente litigan o tal vez en sus familiares. He conocido Jueces, que han abandonado la administración de justicia; por ejercer la profesión de abogados. Cada cual elige el área que mejor le parezca y donde pueda ejercer mejor, el Derecho administrativo, el Derecho penal, el Derecho tributario, el Derecho en la seguridad social, etc.
A DINA BOLUARTE, le tocó un mal momento para ejercer la Presidencia de la Republica del Perú. Pero se le presentó la "oportunidad y la aprovechó" Ella como su antecesor, Pedro Castillo, habrían llegado al poder tan sólo con la finalidad de beneficiarse. 
No me toca juzgarlos; para eso están los jueces. Tampoco me toca defenderlos, para eso están los abogados que ellos tienen la libertad de escogitar a su gusto y beneficio, y los cambian como si cambiaran, una ropa íntima. Menos soy seguidor de alguno de ellos. Mi formación en casa y donde he estudiado, me impiden  creer en un político. Desde pequjeño escuché a mi padre cuando le decía a mi hermana mayor "ningún hombre, es santo hija; el hombre es hombre y se comporta como tal; te lo dice un hombre".
Mi madre me enseñó "en la vida, siempre lucha; nunca desmayes si crees tener la razón; pero esa razón, búscala; y ten presente que te he formado para que todas las cosas que quieras, no necesariamente la vas a tener".
He estado esperando un buen tiempo. Ahora creo que toma fuerza, razón, ese apotegma "cuando el río suena, es porque piedras trae". Poco a poco iré descubriendo aspectos del profesor Pedro Castillo, me hubiera gustado que nada al respecto fuera verdad. Pero en los dos  últimos presidentes hay demasiada tela que recortar para hacer mucha ropa. Es traición a la patria, vender los recursos naturales, nuestras empresas estratégicas nacionales, eso me lo enseñaron dos magnificos hombres Fernando Manrique Enriquez y Alberto Rubio Fataccioli.

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