Una estampa barrioaltina que no debe perderse de la memoria, porque un país que olvida sus tradiciones o costumbres, es un país que perderá fácilmente su idiosincracia e identidad... Testimonio
EL NEGRO MACHETE
Esta estampa criolla de la tradicional zona limeña de los Barrios Altos la conté a un grupo de amigos el 7 de octubre de 2008. Dos semanas después, a un conocido mío le contaron sobre la misma y me escribió diciéndome que no sea "selectivo" con dicha estampa y que la comparta con todos ya que la historia aquella formaba parte de una Lima que ya se fue, pero que nos enriqueció con sus historias y personajes de leyenda. Así que me vi en el deber de compartir la historia aquella con un público más amplio... y como a mí me gusta contar historias, especialmente si son de Lima, pues ahora la comparto de nuevo con todos aquellos que les guste conocer un poco sobre todo aquello que formó, y forma, parte del criollismo en el Perú.
La inquietud la despertó un amigo barrioaltino, quien me preguntó si sabía algo sobre el Negro Machete, una figura popular en las calles barrioaltinas. El Negro Machete era un personaje barrioaltino que solía cargar su leña ofreciéndola a las casas, llevando un machete para cortarla. Su centro de operaciones era por Cinco Esquinas, Conchucos, Maravillas y las zonas aledañas. El tipo era un hombre tranquilo, realmente, pero las madres solían asustar a sus hijos, cuando se portaban mal, diciéndoles que los iban a entregar con el Negro Machete. De allí que los niños le tenían miedo y corrían a esconderse cuando lo veían llegar con su machete colgando de su cintura.
Antiguamente se cocinaba con leña en Lima y el Negro Machete se ganaba la vida vendiéndola. La gente decía que el Negro Machete vivía por el río. Un amigo barrioaltino, tocayo mío, quien vivió en el Jr. Huari y llegó a conocer al Negro Machete, me comentó que se le podía ver enrrumbar hacia Maravillas, contándose que vivía en La Huerta Perdida.
El nombre completo del Negro Machete es un misterio. Tal vez en La Huerta Perdida viva todavía alguno de sus familiares o allí sepan su nombre verdadero. Por la época del Negro Machete, los muchachos barrioaltinos, y los ya no muchachos, atravesaban La Huerta Perdida como si nada, y aunque después dicha zona se hizo de mala fama, hoy en día hay un asentamiento humano en dicho lugar, el cual cuenta con muchos servicios y es un área en continuo desarrollo.
Una información interesante sobre nuestro personaje la dio un amigo del facebook (Mardcopas Lima), quien de niño llegó a conocer al Negro Machete, en un tema que yo había compartido sobre el Negro Machete, comentando que nuestro personaje se llamaba Nicolás y que frecuentaba la casona de su bisabuela en Los Naranjos, llevando cañas con las cuales reparaba los corrales de la huerta, encargándose también del mantenimiento de los jardines. El amigo mencionado también contó que el Negro Machete usaba un sombrero de paja raído, llevando su machete en una vieja y gruesa correa que tenía siempre al cinto; andaba descalzo, usaba unos anteojos grandes de lente verde oscuro y la barba sin afeitar, aunque no muy crecida. Cargaba, a la espalda, un gran saco de yute con huecos, en el cual llevaba sus herramientas para arreglar jardines y reparar corrales, que eran muy comunes en las huertas de las casas por esa época. El Negro Machete, añadió nuestro amigo, vivía muy cerca a la línea del tren en Santoyo, acompañado de muchos perros que cuidaban su rústica casa.
Gamaniel Palomino, pintor y caricaturista barrioaltino (1921-1991), retrató al Negro Machete en uno de sus óleos, inmortalizando de esa manera al personaje aquel que a pesar de ser una persona pacífica, fue utilizado por los mayores para asustar a los niños barrioaltinos cada vez que no querían tomar la sopa o "mataperreaban" mucho... que era casi todos los días.
En una oportunidad, el decimista barrioaltino Germán Súnico Bazán, quien nació el 28 de mayo de 1929 en el Jr. Teniente Arancibia, Barrios Altos, me contó que él, de muchacho, conoció al Negro Machete y sospechaba que quizás sea la persona en quien Pinglo se inspiró para crear su vals "Jacobo el leñador", por ser un personaje popular en los Barrios Altos y vendía leña; sumado a que Pinglo solía retratar en sus canciones a personajes que le llamaban la atención.
Jacobo, el leñador, si existió realmente y no creo que haya sido el Negro Machete, de quien es un misterio su nombre completo ya que todos lo conocían solamente por su apodo de "Negro Machete". Aparte que si uno se fija bien en la letra del vals, para nada se menciona un machete.
Juan Rasilla Moreno, amigo de Pinglo, contó en La Crónica del 31 de mayo de 1945 que Pinglo compuso el vals "Jacobo el leñador" en 1933 y que se lo dedicó a un pobre viejito leñador del barrio. Lo que significa que Jacobo era mucho mayor que Pinglo mientras que el Negro Machete debe haber sido casi contemporáneo con Pinglo; aunque nuestro compositor nos dejó a los 36 años de edad, en tanto que el Negro Machete vivió mucho más.
Dario Mejia Melbourne, Australia Escrito el 22 de Octubre de 2008 Actualizado el 10 de Abril de 2020
Nota:
El grabado del Negro Machete que adjunto a mi nota, es obra del artista barrioaltino Carlos Alberto Ostolaza Ramírez y fue publicado en "Barrios Altos, tradiciones orales", publicación de la Municipalidad Metropolitana de Lima y la Organización de Estados Iberoamericanos para la educación, la ciencia y la cultura, Lima 1998. Las gracias a Orlando Ocampo y Teresa Ostolaza por la información proporcionada sobre el nombre del autor del grabado.
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